En la Argentina, el incremento de la producción de carne es un objetivo permanente. Con un stock de 53 millones de animales y 203.296 establecimientos, la producción de carne vacuna busca reposicionarse en el sector agroalimentario argentino.
Según un estudio realizado en el marco del proyecto disciplinario Gestión integral del riesgo agropecuario, “la actividad ganadera es relevante en la mayoría de las provincias de la Argentina”.
Por esto, especialistas del INTA analizan la situación actual de los sistemas de cría y recría y brindan recomendaciones para intensificar y estabilizar el sistema productivo, aumentar el porcentaje de preñez y lograr una mayor cantidad de terneros por unidad de superficie.
De acuerdo con Sebastián López Valiente, especialista en sistemas de producción ganaderos del INTA Cuenca del Salado, “el potencial de la región permite un margen de incremento en los índices productivos”.
La sanidad del rodeo es un factor clave para reducir las mermas. Por esto, desde el INTA Cuenca del Salado ponen el foco en la importancia del diagnóstico y proponen diferentes esquemas de vacunación, tratamiento, manejo y prevención que aseguran una correcta sanidad.
Por otro lado, López Valiente puntualizó que “muchas veces, el factor condicionante es el ajuste de carga”. En este sentido, añadió que “el estado corporal de la vaca en el preparto es el mejor indicador para establecer si la carga que estamos manteniendo es la adecuada”.
“Para mejorar los índices es fundamental poner el foco en la condición corporal del rodeo, ajustar la carga en los potreros y aplicar un plan sanitario acorde a la realidad de cada zona de producción”, puntualizó López Valiente.
El estado corporal óptimo para la vaca es de 3, en una escala de 1 a 5. “Entrar a la temporada de partos con un estado corporal bajo condiciona el reinicio de la ciclicidad ovárica”, expresó el especialista del INTA quien destacó la importancia de garantizar un buen estado corporal al parto es fundamental.
Para esto, es necesario manejar las cargas en otoño. De este modo, se puede intervenir y disminuir los requerimientos de la vaca para que llegue al parto en mejor estado.
En este punto, López Valiente señaló que la fecha del destete es una herramienta que se usa para disminuir los requerimientos del vientre y que pueda recuperarse con mayor tiempo, antes de la temporada de parto.
Otro momento para intervenir el rodeo y que no afecte el porcentaje de preñez es previo a la temporada de servicio, el tiempo de acción es menor y debemos actuar muchas veces incorporando insumos al sistema.
De todos modos, si no pudieran llegar con un buen estado corporal al parto y, por una alta carga o contingencia climática, los vientres no están con el estado corporal deseado hay herramientas para utilizar y estabilizar los porcentajes de preñez.
Un ensayo realizado en el campo experimental del INTA Cuenca del Saldo sobre sistemas de cría demostrativos demostró que fue posible incrementar la carga más del 50 % e incrementar proporcionalmente la producción de terneros por hectárea, manteniendo los índices reproductivos, con la implementación de cadenas forrajes, un plan sanitario acorde, manejo de carga, según estado corporal y disponibilidad forrajera y la utilización de la fecha de destete.
Debido a la distribución territorial de la ganadería bovina en la Argentina, la generación de tecnologías debe responder a una gran diversidad de condiciones ambientales y socio-económicas propias para cada territorio.