Las ventas minoristas por el Día del Niño registraron una caída del 14,4% en comparación con el mismo período del año anterior, según un relevamiento realizado por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME). El informe, que abarcó 220 comercios de todo el país, refleja un panorama complicado para las pymes, con un consumo marcado por la cautela y una inclinación hacia productos más económicos o en oferta.
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El sábado fue el día de mayor movimiento en los comercios, aunque muchos reportaron que los días previos fueron similares a una jornada habitual. Para la mitad de los comerciantes consultados, el resultado no fue una sorpresa y se mantuvo dentro de las expectativas, mientras que un 25% calificó la fecha como peor o mucho peor de lo esperado, y un 26,9% la consideró mejor o mucho mejor.
El ticket promedio de ventas alcanzó los $31.987, un 165% más que en la última medición, pero muy por debajo de la inflación anual, lo que indica que los consumidores ajustaron sus compras en términos de cantidad más que de valor. Además, un 60,4% de los comercios implementó promociones, superando en 10 puntos el nivel de ofertas del año pasado.
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Rubros más afectados en las ventas por el Día del Niño
El informe de CAME destaca que todos los sectores relevados experimentaron caídas en sus ventas en comparación con el Día del Niño del 2023, siendo los más afectados los rubros de equipos de audio, video, celulares y accesorios, con una baja interanual del 39,6%.
En este sector, el ticket promedio fue de $39.126, con un claro predominio de productos de menor tamaño y costo, como fundas, cargadores portátiles y auriculares. Los consumidores evitaron las grandes inversiones en equipos costosos, lo que contribuyó a la marcada caída del rubro.
Otro sector que sintió el impacto de la baja en el consumo fue el de calzado y marroquinería, que registró una caída del 15,5%. El ticket promedio en este rubro fue de $38.636, con una demanda mayormente orientada hacia el calzado deportivo, impulsada en parte por eventos deportivos como la Copa América y los Juegos Olímpicos. Sin embargo, la estabilidad de los precios no fue suficiente para contrarrestar la disminución en la demanda.
En el caso de la indumentaria y accesorios, las ventas cayeron un 12,5%, con un ticket promedio de $27.213. A pesar de las atractivas promociones y la posibilidad de pagos en cuotas sin interés, el consumo en este sector fue limitado, reflejando la difícil situación económica.
El rubro de jugueterías también experimentó una baja en las ventas, con una disminución del 6,1% y un ticket promedio de $30.626. Aunque el sábado por la tarde se vio una mayor afluencia de compradores, muchos comerciantes reportaron un desplazamiento de ventas hacia el comercio informal, donde los consumidores buscaron opciones más económicas.
Por último, el sector de librerías fue el que menos cayó, con una disminución del 1% en las ventas respecto al año pasado. Los abuelos fueron los principales compradores en este rubro, optando por libros de cuentos ilustrados y colecciones educativas como regalos para sus nietos. El ticket promedio fue de $21.777.
