
El presidente de la Cámara Argentina de Feedlot, Fernando Storni, compartió un balance positivo del primer semestre para el sector de engorde a corral. Destacó una ocupación del 70% en los corrales y un margen bruto estimado de $33.000 por animal. Sin embargo, Storni también lanzó una advertencia sobre el creciente desequilibrio entre los precios de compra y venta, además de la presión sobre el precio del ganado gordo.
"Por suerte ha sido un buen inicio de año desde el punto de vista del resultado para la actividad", afirmó Storni. Explicó que la alta ocupación se debe al avance de la zafra y a un clima favorable. Aunque el crecimiento en la ocupación se ralentizó en mayo (un 2.2% de aumento), los corrales mantienen un buen nivel de hacienda, asegurando una oferta constante.
La rentabilidad se ha sostenido gracias al bajo precio del maíz, lo que permite un costo de kilo ganado "muy interesante" y anima a los productores a sumar más kilos a los animales. El buen clima y la disponibilidad de pasto también han contribuido a este escenario.
Storni detalló que el margen bruto para un novillito liviano típico, sin contar el costo financiero, se sitúa en $33.000 por animal. Esta estimación se basa en un gordo a $3.400, una invernada a $3.500 y un costo de comida de $260.000 por tonelada.
Feedlot de cara al futuro
Pese a los buenos números actuales, la relación entre el precio del gordo y el ternero de invernada está deteriorándose, una señal de alarma para los próximos meses. "Cuando uno encierra hoy, tiene que pensar si el precio al momento de la venta va a permitir cerrar con un margen positivo o no", advirtió el presidente de la Cámara.
Respecto al rol de matarifes, abastecedores y frigoríficos, Storni señaló su activa participación con hacienda propia en los corrales. También mencionó que el consumo interno ha ganado terreno, representando casi el 60% en los establecimientos que ofrecen servicio de hotelería, superando a la exportación.
Sobre el precio al consumidor y la reciente baja inflación en alimentos, Storni se mostró prudente. Explicó que los precios se rigen por la oferta y la demanda, y un posible aumento en la oferta de animales en los próximos meses podría evitar subas inmediatas. Concluyó que la demanda de hacienda liviana (260 a 290 kilos) probablemente mantendrá valores interesantes debido a su escasa abundancia en el mercado de Cañuelas.