La Confederación Intercooperativa Agropecuaria Limitada (Coninagro) publicó un informe especial en el cual contempla las pérdidas millonarias que trajo consigo la sequía y los incendios y cómo las economías regionales quedaron devastadas.
En ese sentido, la entidad dirigida por Carlos Iannizzotto reveló los números provistos por técnicos y productores que cuantifica los daños que están padeciendo en esas zonas y cómo afecta esta crisis a las economías productivas.
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Los cinco sectores afectados
Según datos aportados por el departamento de Recursos Naturales del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), las cinco principales cadenas productivas de la provincia: Ganadera, Forestal, Arrocera, Citrícola y Yerbatera.
Estas cadenas configuran un cuadro de situación cuyo registro de hectáreas quemadas en zonas del litoral como Corrientes, Entre Ríos, Misiones, Chaco y Formosa supera las 520.000.
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Agrolink Radio dialogó con Orlando Stvass y esto nos dijo:
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Orlando Stvass, productor yerbatero de Corrientes y tesorero de Coninagro, señaló que las zonas afectadas la yerba se encuentra en una situación compleja. "En la provincia ya hemos perdido un 60% de la producción para el 2023. En 2022 tenemos el stock asegurado, porque debe estar de 9 a 12 meses estacionada", afirmó.
Según los número, el sector yerbatero estima una pérdida de 3.200 millones de pesos y aún no resulta posible medir y determinar la gran cantidad plantas que se están secando y muriendo. Además de la pérdida productiva, también se le suma la destrucción de la infraestructura -de todos los sectores- como la reconstrucción de alambrados.
Por otra parte, la producción citrícola prevé una pérdida de $1800 millones. Padecieron una pérdida de acceso a mercados por mala calidad (calibre de fruta) y peligran cosechas de otoño, como el limón, y de primavera. Además, las plantas jóvenes se están secando.
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En línea con el sector arrocero, estiman una pérdida de 4.968 millones de pesos, sumado a la mala calidad de grano sin poder ingresarlo al mercado. Y peligra el 65% de la superficie para la próxima campaña.
Uno de los sectores más fuertes como la ganadería argentina prevé una pérdida de $3.575 millones de peso, estimando una mortandad del 1,5% superior al promedio normal y sin considerar los mayores gastos para contener la situación, ni el diferencial negativo de precios por venta forzada.
Mientras que los incendios forestales hicieron estragos, estiman una pérdida para el Litoral argentino de seis mil millones de pesos. "El cálculo referido apenas es estimativo ya que fue configurado sobre 10.000 has. quemadas, cifra que según estimaciones extraoficiales ya alcanza las 13000 has consumidas por el fuego. Plantaciones jóvenes muy comprometidas", señalaron desde Coninagro.
