Hace tres meses, en la localidad de Islas, partido de 25 de Mayo, Buenos Aires, Federico Mazza dio con jabalíes detrás de su galpón. Ahí, muy cerca de su casa el chacarero notó cómo uno de estos se quedó dentro del maíz. Mazza contó a este medio que lo que hizo “fue agarrar la escopeta y salir a cazarlo”. Una vez que venció al animal que jamás había aparecido en dicha zona, lo carneó, hizo chorizos y, la parte que quedaba, fue freezada para luego tirarla a la parrilla. Es carne que viene. “Lo maté y cuando lo abrí tenía la panza llena de maíz”, expresó Mazza a este medio.
Jabalíes en Pehuajó y la plomoterapia
Algo similar sucedió a unos 200 km de 25 de Mayo. El productor Fernando Reynolds expuso el avance de esta especie en sus redes y dejó entrever que son dañinos. Campo, escopeta en mano y cuidar la producción: un tridente ofensivo que se sostiene en el tiempo para quien vive en la llanura pampeana.
“Chanchos jalabi dijo mi hijo. Me tienen alquilado….8 bolsones me van rompiendo. Nueva plaga en el oeste sin depredador natural. Habrá que salir a darles plomoterapia Y al primer ecologista q rompa los huevos también una dosis de plometerapia”, manifestó en la red X.
Chanchos jalabi dijo mi hijo.
Me tienen alquilado.....8 bolsones me van rompiendo. Nueva plaga en el oeste sin depredador natural.
Habrá que salir a darles plomoterapia
Y al primer ecologista q rompa.los huevos también una dosis de plometerapia. pic.twitter.com/9dU9N1lNzL— Fernando (@reynolds_fer) June 23, 2024
En tanto, continuó: “chanchos yendo a la turno de plomoterapia.... Ta fresca la mañana”.
#chanchos yendo a la turno de plomoterapia....
Ta fresca la manana pic.twitter.com/VHR4tRH2OB— Fernando (@reynolds_fer) June 23, 2024
Ayer domingo, Fernando siguió narrando lo que sucede: “Si con esta luna no agarro ni un chancho me bajo 2 tubos de vino solo. Veremos si el ac quemado y gas oíl resulta”.
Si con esta luna no agarro ni un #chancho me bajo 2 tubos de vino solo.
Veremos si el ac quemado y gas oíl resulta pic.twitter.com/sYfK7A9yDv— Fernando (@reynolds_fer) June 23, 2024
Si a pata no salen los chanchos buscamos refuerzos..
Si agarramos habrá asado previo análisis de triqui para el q le de like#chanchos pic.twitter.com/ZGMd4BQ1sA— Fernando (@reynolds_fer) June 23, 2024
Todo lo expuesto ahí arriba es textual.
Algunos datos más
En el año 2019, A través de una disposición número 272, que era publicada el Boletín Oficial bonaerense, el gobierno de la provincia de Buenos Aires habilitaba la caza plaguicida del jabalí o chancho cimarrón (Sus scrofa), ya que “ocasiona perjuicios y daños en la producción agropecuaria“.
El texto de la norma databa de “controlar especies declaradas circunstancialmente perjudiciales o dañinas” que “perturben el normal desarrollo de explotaciones intensivas, como ser zonas tamberas, hortícolas, granjeras, o que atenten contra la debida protección de la flora y la fauna de los parques y reservas, y de las áreas naturales que por sus características merezcan su preservación”.
Dicha medida regía para los municipios de Mar Chiquita, Patagones y Tapalqué, exceptuando las áreas protegidas provinciales.
Jabalíes y triquinosis
En la provincia de La Pampa, zona en donde se practicaba la caza deportiva del animal, durante el año 2021 dieron con el diagnóstico positivo de triquinosis en dos jabalíes. Dado que durante el invierno es común la carenada doméstica de cerdo y animales silvestres para la elaboración de chacinados y salazones en forma artesanal, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) recordaba las medidas de prevención contra la enfermedad.
“Vale destacar que a raíz de los dos últimos casos detectados en jabalíes tanto en General Acha como en Realicó, la Mesa de Zoonosis, conformada por referentes de los ministerios de la Producción y de Salud, INTA, Senasa, Colegio de Veterinarios y Facultad de Ciencias Veterinarias, recomienda a la población analizar la carne previo a su consumo.”, informaban desde el organismo.
Asimismo, remarcaban que “la provincia de La Pampa cuenta con una amplia red de laboratorios habilitados para la realización de la prueba diagnóstica (digestión artificial), distribuidos en el territorio. Este método representa una herramienta fundamental que posibilita la detección temprana y evita la transmisión al ser humano.”
¿Qué es la triquinosis y cómo funciona esta técnica?
Respecto de este tema, desde el Senasa ampliaban que “la triquinosis es una enfermedad que se transmite de los animales a las personas, es decir una zoonosis, producida por Trichinella spp., un pequeño parásito que se aloja en los músculos de los animales. Afecta principalmente a los cerdos y también puede afectar a especies silvestres como jabalíes, pumas, comadrejas y peludos.”
“Los cerdos adquieren el parásito al comer carne con larvas del género Trichinella. Esto ocurre si son criados en malas condiciones higiénico-sanitarias, es decir, en presencia de basura, residuos alimenticios crudos y/o roedores”, añadían.
Y remarcaban que “las personas se enferman al consumir carne cruda o mal cocida de porcinos o de animales silvestres con parásitos o productos sin cocción, como chacinados o salazones (salames, chorizos, bondiola), elaborados con carnes que no han sido analizadas previamente. Es fundamental tener en cuenta que las larvas no se observan a simple vista y no alteran las características externas, ni el sabor ni el color de la carne o de sus derivados.”
“Por este motivo, quienes elaboren chacinados utilizando carne cruda de porcinos o de animales silvestres, deben verificar que la materia prima sea apta para el consumo, remitiendo la muestra a un laboratorio para realizar la prueba de digestión artificial”, agregaban.
Y todo lo expuesto acá arriba, es presente. Los jabalíes silvestres, a pesar de ser sabrosos en chorizos o a la parrilla, pueden llevarnos a esta enfermedad.
Pero, acá el tema: “todo bicho que camina va a parar al asador”, escribió Hernández en un verso del Martín Fierro. La caza es parte de la cultura del productor agropecuario y también se ha vendido a personas que viven en grandes ciudades.
Volvemos a lo santiario
¿Cuáles son los signos clínicos en las personas?
Los cerdos parasitados no presentan signos clínicos. En las personas, se debe poner atención a los siguientes signos clínicos asociados con la triquinosis: fiebre; dolores musculares; hinchazón de párpados; erupción en la piel; diarrea y vómitos; decaimiento similar al de la gripe.
¿Cómo prevenirla?
El Senasa recomienda adoptar las siguientes medidas preventivas:
Para consumidores
•Adquiera chacinados y embutidos de origen porcino o de animales de caza que hayan sido inspeccionados y certificados por el Senasa u otros organismos provinciales o municipales. Los productos deben estar identificados con un rótulo que garantice su control.
- Evite productos de origen desconocido que no posean certificación, dado que representa un alto riesgo para su salud.
- Cocine bien la carne de cerdo, hasta que desaparezca el color rosado en su interior.
- Considere que la salazón, el ahumado o la cocción con microondas no es un método seguro para eliminar al parásito.
- Congelar en el freezer tampoco representa un método seguro para eliminar al parásito.
- Antes de elaborar chacinados o embutidos para autoconsumo, debe remitir una muestra a un laboratorio para que sea analizada.
Para productores
•Respete las normas establecidas por las autoridades sanitarias para la tenencia y la cría de cerdos.
- Aliméntelos adecuadamente, evite que ingieran basura y restos de alimentos de comercios urbanos.
- Combata la presencia de roedores.
- Si realiza faena casera para autoconsumo, debe remitir una muestra de entraña de cada cerdo a un laboratorio para que sea analizada.
- Consulte en el municipio o a su veterinario acerca de los laboratorios donde enviar las muestras para determinar la ausencia o presencia del parásito que provoca la triquinosis.
Para cazadores
•Antes de consumir el producto de la caza, remita una muestra de entraña de cada individuo a un laboratorio, para que sea analizada. Solo podrá utilizarse para consumo y/o elaboración de productos, en caso de resultar negativa la prueba diagnóstica.
- No abandone carcazas en el campo, ya que si el animal de caza tenía triquinosis, otro individuo puede consumir sus restos y de esta manera, la enfermedad se perpetúa en la zona, es decir, continúa circulando.