La llegada del mes de septiembre da inicio a la primavera climatológica en Argentina. Luego de tres años complejos para el sector agropecuario debido a la extensa sequía, el actual punto de partida se enmarca dentro de un contexto mucho más favorable y esperanzador en materia de lluvias, las cuales se estima comiencen a producirse con mayor frecuencia e intensidad con el correr del próximo trimestre en las zonas más productivas del país.
Es la primera vez en siete años que predominan sobre el Pacífico ecuatorial indicios típicos del fenómeno El Niño, bien consolidados ya sobre la componente océano pero con falta de acoplamiento aún en la atmósfera. Si bien el fenómeno no fue declarado oficialmente, las probabilidades de que se mantengan estas condiciones durante la primavera superan al 90 %, produciéndose el ansiado acoplamiento entre el océano y la atmósfera y decantando en el inicio oficial del fenómeno con el correr de esta nueva estación.
Distintas proyecciones climáticas para la primavera sobre el país tienden a mostrar una señal clara de lluvias por encima de lo normal fundamentalmente sobre el norte del Litoral, algo que se espera luego con el correr de la primavera o inicios del verano se haga extensivo a otros sectores del centro del país.
Un invierno caliente que contribuirá a ir por el récord de año más cálido en Argentina
Recordemos que veníamos de una primera etapa del año extremadamente anómala en Argentina, con múltiples récords y olas de calor durante el verano más caluroso a nivel país jamás registrado. Esta inercia se mantuvo de manera inédita para buena parte del mes de marzo, y el otoño terminó tambien en el podio entre los otoños más cálidos en más de 60 años.
Tal como se preveía al comienzo del invierno, la reciente estación termina siendo más calurosa que lo normal en la mayor parte del territorio nacional, con anomalías térmicas muy significativas en el norte argentino, en donde se han dado frecuentes ingresos de aire caluroso que han llegado a elevar las marcas por encima de los 40 °C.
Así las cosas, las anomalías de temperatura media se vienen manteniendo mes a mes positivas a nivel país, y de no mediar ningún cambio inesperado, todo hace creer que 2023 se encamina a ser el año más cálido jamás registrado en Argentina desde 1961, desplazando al actual récord de 2017.
Las lluvias del invierno han mejorado la condición de sequía en la región núcleo
El invierno culmina con dos áreas de destacadas en donde ha llovido por encima de lo normal: el noroeste patagónico y algunos puntos de la región centro-este.
En la Patagonia, sobre el sector cordillerano oeste y noroeste, este año se ha dado la particularidad de que hubo una gran frecuencia de eventos, pero predominaron las lluvias por sobre la nieve, con dos eventos de precipitación extrema del lado chileno en junio y agosto, asociados intensos ríos atmosféricos.
El turismo invernal en Patagonia cierra la estación con la sensación de que no fue una mala temporada en materia de nieve, aunque se mantuvo por el momento por debajo de los acumulados vistos durante el año pasado.
En la región central, las lluvias se volvieron frecuentes especialmente sobre el sur/sudeste de Buenos Aires y amplios puntos de Entre Ríos. El último mes ha visto el regreso de eventos repentinos de inundación como el caso de La Plata. En general, ha disminuido el área aquejada por la sequía, aunque aún permanecen muy relegados los suelos del noroeste bonaerense y la provincia de Córdoba en donde se aguarda por una época más favorable hacia mediados o final de esta primavera.
Pronóstico climático del Servicio Meteorológico Nacional para la primavera
Las miradas ahora están puestas hacia adelante en una primavera que mantendría la inercia cálida en gran parte del país, y que acentuaría la recurrencia y cantidad de lluvias fundamentalmente sobre el noreste argentino.
Primavera con un patrón de dipolo en temperaturas
El reciente pronóstico climático emitido por el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) para el trimestre septiembre-octubre-noviembre anticipa que las temperaturas se presentarían normales o por encima de lo normal en prácticamente la mitad norte de Argentina, con una señal más clara sobre las provincias del noroeste y del norte argentino.
La Patagonia, contrariamente, podría esperar una primavera con temperaturas normales o inferiores a los parámetros normales, de acuerdo al informe oficial del SMN.
Lluvias poco a poco más frecuentes durante la primavera
Respecto a las precipitaciones, es esperable que, bajo un evento El Niño en desarrollo y a oficializarse durante esta primavera, las precipitaciones muestren una señal clara hacia el alza sobre el Litoral, fundamentalmente en la porción norte en provincias como Corrientes y Misiones.
De acuerdo al pronóstico climático oficial, las precipitaciones se proyectan dentro de la normalidad para buena parte del norte argentino, La Pampa y Buenos Aires, y deficitarias todavía en provincias centrales como Córdoba y San Luis.
En la medida que la primavera avance y el verano se acerque, todo hace pensar que los tonos verdes (indicadores de lluvias por encima de lo normal), comenzarán tambien a 'pintar' zonas del norte y del centro de la República Argentina.