En las últimas horas, Roberto Cardarelli uno de los enviados por el FMI a nuestro país dijo algo que para muchos en el sector productivo es sumamente necesario. El economista italiano aseguró que "las tasas van a ir bajando gradualmente, a medida que veamos una disminución de la inflación y agregó que los "altos niveles actuales son el costo que debe pagar la economía para estabilizar las variables financieras".
Esto le esta pegando muy fuerte al sector agropecuario, que por estos tiempos puso el canje como principal moneda de cambio, mientras mira al cielo y espera lo mismo que espera el gobierno, una gran cosecha que oficialmente auguran de 140 millones de toneladas.
Desde el FMI se muestras optimistas sobre el futuro de la economía, aunque aseguran que el piso se tocará cuando comience el verano. Le recuperación vendría a partir del otoño pero el problema de muchos productores es pensar cómo se llega y en qué condiciones a ese tiempo en el que (todos prometen) las cosas serán distintas, al menor en lo económico. Cuesta creer, porque los errores fueron muchos y muy visibles.
De dólar, inflación, perspectivas para 2019 y de lo que pasa en el campo, Daniel Aprile conversó con Andres Dominguez, economista en Red Consultora.
DÓLAR EN LA BANDA DE FLOTACIÓN
Al sector productivo, todo le ha pegado este año. En cuanto al dólar, muchas veces nos quedamos con la noticia del día o de la semana y vemos un dólar a 35 pesos y nos parece que está barato. Sin embargo, no podemos olvidar que si lo comparamos hace un año, la devaluación fue de más de un 80%. Y eso tampoco quiere decir que de repente los exportadores van a tener una rentabilidad récord.
Otro tema que debemos analizar es ¿cómo se logró contener al dólar? Con el segundo acuerdo con el FMI y unas tasas de interés del 70% que hacen inviable la producción. En Mendoza los productores no tienen para levantar la cosecha y tampoco acceso al crédito.
El control del dólar era necesario, porque veníamos de varios meses con aumentos en el tipo de cambio y de demasiada incertidumbre, pero tuvo un costo altísimo. Y si a eso le sumamos la inflación que no va a estar por debajo del 5%, entonces hay un peligro que es que la tentación de "calmar el dólar", con una inflación anual cercana al 50%, si se pretende controlar el tipo de cambio, el año que viene podemos tener una situación que se parecerá mucho a la que nos llevó a la crisis. Por lo tanto, no hay que festejar antes de tiempo.
¿REVANCHA DEL TRIGO?
El gobierno habló mucho de la "revancha del trigo" y si bien el cultivo viene bien, en el medio después de haber sembrado aparecieron las retenciones, por lo tanto no estamos en condiciones de adelantar ningún festejo.
EL ENDEUDAMIENTO
La pregunta que muchos se hacen es si de ésta situación se sale con endeudamiento o si hay que gastar menos de lo que se recauda.
Según Dominguez, nadie puede estar en contra de eso, sin embargo es un concepto "simplificado". Estados Unidos es un país endeudado al que le va bien. Por otra parte Alemania es un país que tiene superávit y paga su deuda con sus ahorros. El problema aquí es que Argentina tomó deuda y no la usa para generar infraestructura o innovación productiva sino que la utiliza para pagar gastos corrientes: es como si una persona en vez de pedir prestado para poner una empresa o para arreglar su casa, que sería capitalizarse, se genera valor y luego puede devolver. Pero si usa la deuda tomada para hacer una fiesta de 15, eso es un problema. Este gobierno había empezado a hacer obras, pero la necesidad de ajuste fiscal lleva a que esas acciones se frenen en alguna medida.
Cuando llegó el gobierno se evitó el ajuste de "shock" por las consecuencias sociales: en aquél momento se dijo que se iba a ir gradualmente, y Argentina tenía una situación delicada, pero no gravísima. Ahora la situación es mas compleja, se hacen los ajustes fuertes y las consecuencias sociales son peores. Entonces algo estaba equivocado.
EL 2019: INFLACION Y TIPO DE CAMBIO
No hay ninguna chance de que el 2019 nos encuentre con una inflación razonable. Bajar al 18% después de una inflación del 50% implicaría una recesión terrible.
En 2017 el presupuesto que se votó para este año, tenía una meta inflacionaria del 12%. Luego vino el famoso 28D donde Sturzenegger junto a Dujovne aumentaron la pauta de inflación al 15%. El año pasado, en diciembre el gobierno corrigió la inflación y aquí estamos, sólo en septiembre 2018 fue del 6%.
En cuanto al dólar, vale destacar que en períodos electorales se pone el dólar como un ancla y luego rebota. Pasó siembre después de las elecciones, que el dólar aumenta.
ESCUCHA LA ENTREVISTA COMPLETA REALIZADA EN #RADIOCAMPO, POR AM 550 RADIO COLONIA