Se celebra el Día Mundial de la Relajación con el fin de crear conciencia global sobre los peligros que genera el estrés en la salud de las personas.
Hasta el momento se desconoce el origen de esta celebración. Sin embargo, es posible definir a la relajación como la disminución de la tensión de una persona para lograr un estado de tranquilidad, reposo o descanso físico o mental, según informa La Nación. Algunas de las actividades asociadas a la relajación son el yoga o las técnicas de respiración controlada.
Según advierte María de los Ángeles Sánchez Calvin (MN 12.1757), médica especialista en nutrición y en psiconutrición y psiconeuroinmunoendocrinología, el problema del estrés es cuando se vuelve crónico. Según detalla, este sentimiento contribuye al debilitamiento del sistema inmune, que es el encargado de proteger a las personas de las enfermedades.
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“Las emociones están íntimamente ligadas a las funciones corporales: el estrés contribuye al debilitamiento del sistema inmune, que es el encargado de protegernos de las enfermedades. Al debilitar las defensas, nos hace más propensos a contraer enfermedades como el resfrío o la gripe, cambiando la absorción, alterando la microbiota, generando una rotura en nuestra barrera intestinal, con disminución de las secreciones gástricas y de los movimientos peristálticos”, explica la médica.
Por este motivo, los especialistas recomiendan el aprendizaje de técnicas de manejo de ansiedad como mindfulness, yoga, relajación y, además, cuidar las rutinas diarias, los buenos hábitos y el descanso, favorecer el ejercicio físico programado y con disfrute.
En los últimos años, el avance de la tecnología que atraviesa a todas las esferas de la actividad social hace que sea difícil encontrar momentos de pausa. Por este motivo, una de las actividades que se recomiendan en el Día de la Relajación para lograr cortar con la rutina es pasar una jornada “analógica”, libre de tecnología.
