
El SMN, organismo encargado del monitoreo climático recordó que las previsiones trimestrales reflejan un comportamiento promedio esperado del clima, pero aclaró que estas no excluyen la posibilidad de fenómenos puntuales que puedan alterar la normalidad. Entre los eventos que podrían presentarse se encuentran lluvias intensas en determinadas regiones, períodos prolongados de sequía, olas de calor y sorpresivas irrupciones de aire frío.
Según los especialistas, estas situaciones, aunque no sean permanentes ni generalizadas, pueden generar impactos significativos en la agricultura, la ganadería y la vida cotidiana de la población, por lo que la recomendación principal es seguir de cerca los pronósticos diarios y semanales, así como los reportes emitidos por el sistema de alerta temprana.

El organismo también destacó la importancia de la información oportuna y actualizada, recordando que las condiciones climáticas pueden variar rápidamente y que la preparación anticipada es clave para mitigar riesgos. Por ejemplo, en zonas agrícolas, lluvias intensas pueden afectar cultivos en etapas sensibles, mientras que olas de calor o irrupciones de aire frío pueden alterar la producción ganadera y aumentar la demanda energética en las ciudades.

Los pronósticos trimestrales, elaborados a partir de modelos estadísticos y satelitales, permiten identificar tendencias generales y brindar orientación a los distintos sectores, aunque siempre acompañados de reportes más puntuales que permitan anticipar situaciones extraordinarias.
En este contexto, las autoridades meteorológicas recomiendan a la población mantenerse informada a través de canales oficiales y medios confiables, especialmente ante la posibilidad de fenómenos climáticos extremos, y tomar las precauciones necesarias para proteger tanto la salud como la actividad productiva en cada región del país.