El Ministerio de Salud de la Nación emitió una alerta epidemiológica por un brote de "Fiebre Q" en un frigorífico en Diamante, Entre Ríos. En total, fueron 11 los trabajadores que presentaron signos de esta enfermedad, pero solo 10 fueron internados. Afortunadamente, todos pudieron recuperarse.
Los 11 trabajadores afectados presentaron cuadros de cefalea, mialgias, fiebre y tos. Según informó la cartera, el brote fue como consecuencia del "cierre de una campana de ventilación en el ambiente de trabajo compartido por todos los trabajadores que se contagiaron".
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En ese sentido, aseguraron que se pudo determinar que la enfermedad se desarrolló luego del "contacto directo con tejidos y fluidos animales" y "por deficiente uso de equipos de protección personal e insuficiente ventilación de algunos sectores de faena, y condiciones de humedad y potenciales zonas donde podrían acumularse fluidos".
Además, todos los afectados trabajaban en la "misma área de faenado de carne de vaca y cerdo del frigorífico".
¿Qué es la Fiebre Q?
La fiebre Q es una zoonosis, que puede afectar tanto animales como humanos. Es de distribución mundial y según admite la cartera sanitaria nacional, se desconoce su prevalencia en Argentina.
La población de riesgo ante esta patología son: trabajadores rurales, veterinarios y ganaderos. Quien padece esta enfermedad puede desarrollar desde cuadros asintomáticos hasta graves como neumonía o hepatitis.
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¿Cómo se contagia?
La responsable de esta enfermedad es la bacteria Coxiella burnetii, la cual puede infectar a los humanos mediante la inhalación de polvo contaminado por las heces, la orina, la leche, los tejidos placentarios y/o líquidos durante el parto.
Además, puede transmitirse a través del consumo de productos lácteos no pasteurizados y contaminados. Otra forma de transmisión es mediante el contacto directo con animales infectados y otros materiales contaminados, como lana, paja y ropa.