Con los días de calor en plena temporada de verano, los helados de agua son una opción refrescante y deliciosa para disfrutar en cualquier momento, pero especialmente en esta época de altas temperaturas. Lo mejor de todo es que con esta receta especial puede ser preparado fácilmente en casa.
¿Cómo hacer helados de agua? El paso a paso
Preparar helados de agua en casa es una actividad divertida y sencilla, ideal para compartir con la familia. Comenzá por elegir tus frutas preferidas. Las más populares son la naranja, limón, frutilla y mango, pero podés experimentar con la que más te guste. Asegurate de que las frutas estén maduras y jugosas, ya que esto influirá directamente en el sabor del helado.
Elegí las frutas: Seleccioná frutas maduras y jugosas. Las opciones populares incluyen naranja, limón, frutilla y mango.
Prepará el Jugo de Fruta: Exprimí o licuá las frutas para obtener su jugo. La cantidad dependerá del número de helados que quieras preparar.
Endulzá la mezcla: Agregá azúcar, miel o un edulcorante a tu gusto al jugo de fruta. Recordá probar la mezcla para ajustar el dulzor según tu preferencia.
Mezclá bien: Asegurate de que el endulzante se disuelva completamente en el jugo de fruta.
Verté el juego en moldes: Distribuí la mezcla en moldes para helados. Si no tenés, podés utilizar vasos pequeños o cubeteras.
Colocá los palitos y congelá: Insertá un palito de helado en el centro de cada molde. Después llevá los moldes al freezer y dejalos durante 4 a 6 horas, o hasta que los helados estén completamente congelados.
Desmoldá: Pasá los moldes por agua tibia para desmoldar los helados con mayor facilidad.
Consejos para hacer los helados de agua caseros más ricos
Para lograr helados de agua caseros aún más deliciosos, especialmente con sabores frutales, hay varios consejos que podés seguir. Primero, la selección de frutas es clave. Optá por frutas de temporada, ya que suelen ser más sabrosas y jugosas. Esto garantizará un sabor intenso y natural en tus helados.
Otro aspecto importante es la textura. Para evitar la formación de cristales de hielo, que pueden dar una textura arenosa a los helados, es útil agregar un poco de pulpa de fruta a la mezcla. Esto no solo mejora la textura, sino que también intensifica el sabor.
Por último, no tengas miedo de experimentar con combinaciones de sabores. Las mezclas de frutas pueden resultar en sabores únicos y sorprendentes. Por ejemplo, la combinación de frutilla y kiwi o mango y maracuyá pueden ofrecer una experiencia de sabor refrescante y original. Experimentá con diferentes proporciones hasta encontrar la mezcla que más te guste.