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Manejo de enfermedades: una ayuda digital para mejorar el “timing” de las aplicaciones y el retorno de la inversión

Luego de una campaña en la que se sintieron con dureza los efectos de la sequía, y en medio de la fuerte suba de costos que enfrentan los productores en Argentina, ser más eficientes se impone como una premisa para el nuevo ciclo productivo. A la vez, se...

Luego de una campaña en la que se sintieron con dureza los efectos de la sequía, y en medio de la fuerte suba de costos que enfrentan los productores en Argentina, ser más eficientes se impone como una premisa para el nuevo ciclo productivo.

A la vez, se espera una temporada con un gran aporte de lluvias, lo que implicará mayor presión de enfermedades, por lo que la precisión al momento de las aplicaciones de fungicidas será fundamental.

En ese marco, durante la realización del último Congreso Aapresid el responsable de Investigación y Desarrollo de xarvio Digital Farming Solutions -la plataforma de soluciones digitales de BASF-, Earle ‘Cocó’ Gastaldi, presentó los beneficios de la herramienta digital Spray Timer, uno de los servicios a los que pueden acceder los productores que utilizan la plataforma xarvio Field Manager.

Se trata de una herramienta que realiza el pronóstico de enfermedades en base a algoritmos desarrollados a lo largo de 25 años y que combinan múltiples variables ambientales con el monitoreo de los cultivos, permitiendo protegerlos actuando en el momento adecuado, de manera de eficientizar el uso de fitosanitarios y a la vez maximizar el retorno de la inversión.

¿CÓMO FUNCIONA SPRAY TIMER?

“xarvio es una herramienta que mejora el manejo y ayuda a optimizar la toma de todas las decisiones que hacen a la producción agrícola. En este sentido, Spray Timer lo que aporta es ahorro de tiempo, certeza de decisiones que brinda mayor retorno de la inversión y una agricultura más sustentable”, destacó Gastaldi.

El representante de xarvio declaró que se trata de modelos informáticos complejos, desarrollados durante varias décadas de experiencia con base a datos de los cultivos, lluvias, enfermedades y productos que se utilizan en el campo, lo que le da sustento a las predicciones que hace el sistema.

Además, utilizan herramientas de inteligencia artificial y machine learning, para que los algoritmos todo el tiempo estén incorporando nueva información y actualizándose de manera automática. También se valida con asesores a campo, que trabajan en diferentes regiones del país, y determinan el éxito del sistema y sugieren eventualmente correcciones.

“Son más de un millón de datos analizados para que esta herramienta sea la más eficaz en la predicción del momento para actuar ante la posible aparición de enfermedades. Pero todo se basa también en los monitoreos que se hacen a campo y nunca deben perderse. Pasamos de la incidencia y la severidad en un lote, a datos hoja por hoja, porque la calidad de la información es lo que mejora la calidad de los modelos”, graficó Gastaldi.

¿Cuánto es posible ahorrar?

El software ya se viene utilizando para los cultivos de trigo y cebada con excelentes resultados. Por ejemplo, para el combate de la roya amarilla, se realizaron más de 300 ensayos entre ambos cultivos.

El sistema lo que realiza en primer término es un modelo de riesgo de infección, que arroja un color amarillo cuando hay condiciones ambientales para que la enfermedad se desarrolle, y rojo cuando el proceso ya está efectivamente en marcha.

Luego, también se puede observar en el panel cómo la enfermedad va avanzando y en qué momentos está ejerciendo mayores problemas, relacionado también con datos clave como el flujo de lluvias y las temperaturas, y también qué productos se aplicaron, cuándo y en qué dosis.

Así, eventualmente, un productor o asesor puede prever que en cierto lote o en cierta zona del campo es posible que el color de las alarmas pase de verde a amarillo, o de amarillo a rojo, en los próximos días, e intensificar los monitoreos en esos lugares.

Basados en todo este análisis, ensayos realizados con trigo en Balcarce (Santa Fe) y Diego de Alvear (Buenos Aires) en el ciclo 2021/22, determinaron que el retorno de inversión utilizando el Spray Timer con 1,2 aplicaciones fue U$S 135 por hectárea, gracias a un incremento de los rindes de 640 kilos; U$S 34 más que realizando dos aplicaciones y U$S 17 más que realizando una sola, teniendo en cuenta la fenología en el cultivo.

Ahora, también en soja

En cuanto a la soja, los ensayos y recolección de datos comenzaron en 2020 y en este momento xarvio está en proceso de revisión de los modelos generados para su lanzamiento comercial, pero los resultados preliminares de los más de 200 ensayos realizados hasta ahora también muestran una mejora significativa del retorno de inversión en relación con aplicaciones de fungicidas tradicionales.

Para la conformación de este modelo, se evaluó la susceptibilidad de diferentes variedades a Septoria y Cercospora; y se sumó a la vez como factor el efecto de diferentes fechas de siembra, en diferentes regiones, y su impacto asociado con el clima.

En este caso, los ensayos realizados muestran que una aplicación según la sugerencia de Spray Timer, en R1, eleva los rindes en alrededor de 1,3 toneladas por hectárea, lo que significa un retorno de la inversión de más de U$S 35 por hectárea.

“En definitiva, es un pronóstico de enfermedades que perfecciona el monitoreo, para actuar con una aplicación en el momento certero y de esta manera maximizar el retorno de la inversión”, concluyó Gastaldi.