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¿Qué desafíos debe vencer la Argentina para ser un país foresto-industrial?

Pese a los esfuerzos del gobierno, la forestación sigue siendo una actividad postergada dentro del sector productivo. Osvaldo Vassallo, Presidente de la Asociación Forestal Argentina, aseguró que en nuestro país hay capacidad para forestar en 52 millones de hectáreas. ¿Qué discusiones deben darse a futuro? ¿Vendrán inversores del exterior? ¿Se podrán hacer viviendas con madera?

La Mesa Forestal tuvo en el mes de diciembre su 6to. encuentro con el Presidente Mauricio Macri y parece ser uno de los sectores en los que el gobierno pone la lupa para fomentar el desarrollo. Pese a esto, la forestación sigue siendo una actividad postergada por la política y la economía.

Para avanzar, el Senado de la Nación acaba de aprobar el proyecto de ley que prorroga y modifica la Ley 25.080, de Inversiones para Bosques Cultivados. Esta ley tiene como finalidad incrementar el stock de 1,3 a 2 millones de ha de bosques cultivados en el país para 2030 y tendría un gran impacto económico-social en las economías regionales, además de ayudar a mitigar los efectos del cambio climático.

Hoy, nuestro país cuenta con un stock de 1,3 millones de ha de plantaciones forestales, principalmente de pino, eucalipto y salicáceas. Más del 40% de estas plantaciones se encuentran certificadas por sellos de gestión sostenibles y proveen de materia prima al 95% de las industrias de base forestal del país, que incluyen a más de 2.700 PyMES, generando empleo directo a 100.000 personas. Desde AFOA, aseguran que "con las condiciones ideales, el país podría captar 3.000 millones de dólares en inversiones, triplicar sus exportaciones y revertir el déficit comercial".

EL CLIMA Y LA FORESTACIÓN

El cambio climático y sus efectos catastróficos se señalan como la fuente de mayor riesgo global de los próximos años. El propio World Economic Forum, señala la ocurrencia de eventos climáticos extremos y desastres naturales como las dos fuentes de riesgos más importantes para los próximos años, tanto por la probabilidad de que sucedan como por los daños y pérdidas que pueden causar.

Sin embargo, según confirma Vasallo, fue justamente una polémica "medioambiental" la que "demoró 10 años y demorará otros 10 para que la Argentina se desarrolle como debería en la actividad forestal".

Así como alguna vez se dijo "el que apuesta al dólar pierde" o "somos un país condenado al éxito", yo cometí mi propia estupidez y dije "Argentina va a ser un país forestal".

Las pruebas son elocuentes. Vasallo precisó que "en el año 66, Argentina producía 70 mil toneladas de todo tipo de pastas y Brasil llegaba a las 280 mil. En aquel entonces, la relación era de 1 a 4. Hoy Argentina sigue en la misma cantidad y Brasil multiplicó por 20".

Durante la entrevista, Vasallo mencionó un dato sumamente llamativo si uno lo mira desde el punto de vista de la contaminación y el impacto que tienen algunas actividades productivas en el medioambiente. "Yo celebro que se estén rediseñando o rearmando 20 frigoríficos para exportar carne vacuna congelada por 1500 millones de dólares al año, pero eso es menos que una planta de pulpa, que puede dar 2 mil millones de dólares. Una sola, y nuestro país podría tener tres o cuatro".

EL FUTURO DE LA FORESTACIÓN

"En los próximos años, no sólo vamos a encontrar el protocolo de Tokio o de Río de Janeiro. todo lo que sea recuperable o sustentable va a ser palabra válida y lo que no va a quedar de lado".

VIVIENDAS CON MADERA

"En Argentina existió la vivienda ´tarzán´, pero por cómo somos, donde iban habitaciones de 3x3 o 3x4, hacíamos 1x3 (metros), entonces pasaron a llamarse ´la casa de los chanchitos´. Todos se dieron cuenta que no servía para nada y cambiar esa imagen nos va a llevar mucho tiempo".

La falta de viviendas es un problema grave en la Argentina y la actividad forestal puede hacer mucho en éste sentido. La propuesta de Vasallo es que "la vivienda social se puede hacer igual que cualquier tipo de vivienda, pero hay que atacar el segmento ABC1 para que luego derrame. Esa es la única manera de cambiar el preconcepto que existe. Si los que más poder adquisitivo tienen, con comodidades de primer nivel lo validan, el resto se va a copiar". Agregó que "tiene muchos beneficios y promueve el ahorro de energía, ya que en ellas se mantiene la temperatura interna en 24 grados". Sin embargo, somos reticentes y "la gente pide ladrillo".

Pero debemos pensar en el futuro. Vasallo destacó que "en Finlandia, hace unos meses, me dijeron que "todo lo que se hacía con plástico a partir de ahora se va a tener que empezar a hacer con madera", apuntando a los recursos que son renovables y desechando los que no lo son, como el petroleo.

INVERSIONES

"Si somos consistentes, serios e inteligentes no vamos a tener problemas para que vengan inversores, como fueron a Brasil, Uruguay o Paraguay". Pero debemos pensar en el futuro que queremos".