A partir de una iniciativa del Jardín Botánico Carlos Thays ubicado en el barrio porteño de Palermo junto con la Fundación Félix de Azara de origen francés buscan trabajar en la reforestación del "monte blanco", una región del Delta del Paraná ubicada sobre los albardones de las islas, que ha sido muy degrada.
El proyecto trabaja sobre tres ejes fundamentales: producción y conservación de biodiversidad; educación sobre el valor de la naturaleza y construcción de conciencia pública sobre la importancia del mundo vegetal.
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Tras el trabajo humano sumado a la flora exótica dejaron de crecer las especies nativas de la zona como el sen de campo, canelón, ceibo, murte, entre otras. Por otra parte, luego de una investigación botánica y recorrida del terreno, lograron recuperar semillas nativas, que se están plantando actualmente para poder recuperar la rica biodiversidad.
Los nuevos ejemplares listos para ser plantados en la zona del Delta del Paraná conocida como Monte Blanco.
"Es un trabajo delicado, manual, que requiere de mucha paciencia y esfuerzo. Se trata de caminar, seleccionar frutos, cuidar que las aves no se los coman, se protegen mediante bolsas de gasa especiales", explicó la directora del jardín, Graciela Barreiro.
Para poder preparar la superficie y trasplantar los ejemplares, se debió eliminar las especies exóticas que crecieron en el Jardín Botánico. Sin embargo, algunos árboles de gran porte se dejaron ya que la sombra ayuda al establecimiento de las pequeñas nativas.
El área todavía se encuentra en recuperación para lograr mejorar la biodiversidad y ser un espacio de educación para generaciones futuras.
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Los albardones ocupados por el "monte blanco" en el Bajo Delta del Paraná
La región del Bajo Delta del Paraná constituye una unidad natural de características biogeográficas y ecológicas únicas en la Argentina. Hacia fines del siglo XIX los albardones perimetrales de estas islas estaban ocupados por el "monte blanco" o selva en galería con importante complejidad estructural y diversidad específica, constituido por especies provenientes de la selva paranaense y bosques chaqueños.
En la actualidad el monte blanco fue eliminado casi en su totalidad en las islas del Delta del río Paraná y sólo se encuentran parches relictuales con escasa representación a nivel regional. Esta situación fue producto del uso de los albardones por actividades frutihortícolas, durante la primera mitad del siglo XX y a una intensa práctica forestal con salicáceas.
