Luego de la fuerte suba que tuvo la nafta en diciembre, podría tener otro incremento debido a la actualización de un impuesto.
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El ministro de Economía, Luis Caputo, busca subir un impuesto, pero eso impactaría de manera directa en la nafta.
Sin dudas que esto se trasladaría también a la inflación, ya que el impacto en los precios del transporte de alimentos es directo.
El impuesto a los combustibles líquidos (ICL) y al dióxido de carbono se ajusta desde el 2018 de manera trimestral, pero desde hace dos años y medio que lo que recibe el Estado por el tributo, no tiene modificaciones debido a la prorrogación que se hizo del aumento en época de inflación.
En noviembre del 2023, Alberto Fernández postergó la suba hasta febrero de 2024: “los incrementos en los montos de dichos impuestos que resulten de las actualizaciones correspondientes al tercer y cuarto trimestres calendario de 2021, al primer, segundo, tercer y cuarto trimestres calendario de 2022 y al primer, segundo y tercer trimestres calendario de 2023, surtirán efectos a partir del 1° de febrero de 2024, inclusive”.
Esto implica que la semana que viene el Gobierno de Javier Milei debe decidir si se realiza otra prórroga o no.
En la actualidad el valor del impuesto es de $20 por litro, lo que significa que el 3% del valor total, cuando siempre había representado al 10%.
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De qué depende la suba del impuesto
Según informa Infobae, todavía se está evaluando la decisión que depende mucho de lo que pueda pasar en el Congreso con la Ley Ómnibus y la aprobación del regreso de las retenciones.
Desde las compañías petroleras creen que no habrá una nueva prórroga y que se trasladará el precio a los surtidores.
Esta controversia es un verdadero desafío para el Gobierno que para el mes de febrero espera que la inflación se ubique debajo del 15%.
